Su taller, ubicado en el Barrio Cordillera de Ciales, es allí donde Marcos hecha a andar su imaginación. Hace 4 años decidió certificarse como artesano de madera a insistencia de amigos y clientes que querían que sus trabajos se vieran en diferentes lugares de PR. Comenzó haciendo una vinera con la bandera de PR para un amigo y la foto se fué viral en sus redes sociales. De esa foto salieron los primeros pedidos hasta que decidió ampliar sus diseños y piezas. Lo más que le gusta de ser artesano es, a parte de representar la cultura e identidad de su Patria, Puerto Rico, es ver la cara de felicidad cuando un cliente adquiere un trabajo. La mayoría de las veces no es por el dinero que genere, más bien por saber que la obra está en un lugar donde la cuidan y valoran.